Ese revolucionario tablero de fibras procede de residuos celulósicos de la industria del papel y es totalmente biodegradable y reciclable. No sólo es sostenible y saludable (no emite COVs y no lleva resina tóxica) sino superior a los materiales tradicionales en cuanto a resistencia y durabilidad. Resiste a la humedad y al fuego e incluso provee aislamiento acústico y térmico.
HONEXT estuvo investigando 6 años antes de poder salir al mercado. Todo el equipo de esa innovadora « start-up verde » de Barcelona está comprometido con la economía circular y la sostenibilidad en general; la fábrica tiene cero impacto medioambiental y el proceso de producción ha sido optimizado al máximo a través de colaboraciones industriales de proximidad.